LAS DOCE CLAVES DE BASILIO VALENTIN
Cuarta Clave
Omnis in orbe caro quae terrâ traxerat ortum,
In cineris rursus post breve tempus abit.
E cinere exurget sal, quod revocabit ad auras
Crnem, praedicto quae resoluta modo.
Qui cupis hoc cursu revocatas cernere formas,
Redde sali sulphur mercuriumque simul.
Toda carne aquí abajo, proviene de la tierra,
Al cabo de poco tiempo retornará a cenizas;
La sal saldrá de allí, por medio de la cual
Reaparecerá al día la carne así disuelta,
Tú que de esta manera quieres ver las formas pasadas,
Entrega a la sal a la vez el azufre y el mercurio.
Omnis in orbe caro quae terrâ traxerat ortum,
In cineris rursus post breve tempus abit.
E cinere exurget sal, quod revocabit ad auras
Crnem, praedicto quae resoluta modo.
Qui cupis hoc cursu revocatas cernere formas,
Redde sali sulphur mercuriumque simul.
Toda carne aquí abajo, proviene de la tierra,
Al cabo de poco tiempo retornará a cenizas;
La sal saldrá de allí, por medio de la cual
Reaparecerá al día la carne así disuelta,
Tú que de esta manera quieres ver las formas pasadas,
Entrega a la sal a la vez el azufre y el mercurio.
CUARTA CLAVE:
“Toda carne aquí abajo, proviene de la tierra, al cabo de poco tiempo retornará
a cenizas; la sal saldrá de allí, por medio de la cual reaparecerá al día
la carne así disuelta, tú que de esta manera quieres ver las formas pasadas,
entrega a la sal a la vez el azufre y el mercurio”.
Es en
el crisol donde la materia prima de la Gran Obra sufre con infinita paciencia
la pasión del señor. En el erótico crisol de la alquimia sexual muere el ego y
renace el “Ave Fénix” de entre sus propias cenizas: INRI, “In Necis
Renaceré Integer” (En la muerte renace intacto y puro)
Los
principios de todos los metales son: la Sal, el Mercurio y el Azufre. Cada uno
por sí solo no podría dar origen a los diversos metales, pero unidos crean, así
la piedra filosofal contiene inevitablemente estos tres principios.
El
fuego es el Azufre; el Mercurio es el Espíritu; la Sal es la maestría de la
Alquimia, el amor.
Quinta Clave
Terra nihil per se tenues producit in auras :
Spiritus est vitam qui dat, eamq; fovet.
Spiritus hic nitidis ortum deducit ab astris.
Hinc capiunt vides cuncta metalla suas.
Est lapis Herculeus ferro conjunctus amore :
Mercurium nostrum sic Leo noster amat.
La tierra por ella misma no produce nada,
Es el espiritu quien abastece y sostiene la vida.
Toma su origen de los astros luminosos.
De allí todos los metales extraen sus cualidades.
La piedra Hercúlea se une con amor al hierro,
Así , nuestro león ama a nuestro mercurio.
Terra nihil per se tenues producit in auras :
Spiritus est vitam qui dat, eamq; fovet.
Spiritus hic nitidis ortum deducit ab astris.
Hinc capiunt vides cuncta metalla suas.
Est lapis Herculeus ferro conjunctus amore :
Mercurium nostrum sic Leo noster amat.
La tierra por ella misma no produce nada,
Es el espiritu quien abastece y sostiene la vida.
Toma su origen de los astros luminosos.
De allí todos los metales extraen sus cualidades.
La piedra Hercúlea se une con amor al hierro,
Así , nuestro león ama a nuestro mercurio.
QUINTA
CLAVE:
“La tierra por ella misma no produce nada, es el espíritu quien abastece
y sostiene la vida. Toma su origen de los astros luminosos. De allí todos los
metales extraen sus cualidades. La piedra Hercúlea se une con amor al hierro,
así nuestro león ama a nuestro mercurio”.
El
león representa al hierofante, la ley, el rigor, el signo de la omnipotencia
divina; quien ama a aquellos que trabajan con el mercurio y desarrollan
sus virtudes.
Los
metales representan los cuerpos del ser humano, el primero que transmutamos en
oro es el cuerpo de la Conciencia.
El
segundo metal que hay que transmutar es el cuerpo Etérico.
Los cuatro cuerpos
del pecado son remplazados por cuatro cuerpos celestiales, que sirven de templo
al Espíritu Triuno e inmortal. En este trabajo de alquimia, las substancias
espirituales se vuelven corpóreas, y las substancias corpóreas se vuelven
espirituales.
Así
pues, todos los metales de la Tierra pueden ser descompuestos en el Mercurio,
porque el mercurio es la materia prima de todos los metales. Este Mercurio es
el Semen espermático, en el cual pueden descomponerse todos los metales, porque
ese es el elemento de donde salen todas las cosas.
Sexta Clave
Foemina juncta mari producat semine germen
Tum sua Neptunus balnea ritè paret,
Mas duplex niveo post pascatur Olore,
Perdat ut, et vitam cernat uterque suam.
Quatuor hinc venti spirabunt, Rexq: per ignem
Jungetur sponsae, plenus amore, suae.
Hembra y macho unidos hacen germinar la semilla.
Que entonces Neptuno prepare los baños requeridos
Después de que el macho doble devore un nevoso cisne
A fin de que dos pierdan y recobren su vida,
Cuatro vientos soplarán y el rey, por el fuego,
Se unirá lleno de amor, a su esposa querida.
Foemina juncta mari producat semine germen
Tum sua Neptunus balnea ritè paret,
Mas duplex niveo post pascatur Olore,
Perdat ut, et vitam cernat uterque suam.
Quatuor hinc venti spirabunt, Rexq: per ignem
Jungetur sponsae, plenus amore, suae.
Hembra y macho unidos hacen germinar la semilla.
Que entonces Neptuno prepare los baños requeridos
Después de que el macho doble devore un nevoso cisne
A fin de que dos pierdan y recobren su vida,
Cuatro vientos soplarán y el rey, por el fuego,
Se unirá lleno de amor, a su esposa querida.
SEXTA
CLAVE:
“Hembra y macho unidos hacen germinar la semilla. Que entonces neptuno prepare
los baños requeridos, después de que el macho devore su nevoso cisne a fin de
que dos pierdan y recobren su vida, cuatro vientos soplarán y el rey, por el
fuego, se unirá lleno de amor a su esposa querida”.
Esta
clave representa encantamiento, equilibrio, unión amorosa de hombre y mujer.
Lucha terrible entre el amor y el deseo. Es enlazamiento. Representa la lucha
entre el espíritu y la bestia animal.
"Cambia las Naturalezas y hallarás lo que buscas". Si queremos
sublimar nuestras bajas pasiones, debemos primero ser castos para reducir todos
nuestros metales a su materia original.